Archive for junio 5th, 2010
Grandes manifestaciones en Europa contra agresión israelí…
Miles de personas se manifiestan en Europa contra el asalto israelí a la flotilla
Pura agresión criminal sin ninguna justificación, por N. Chomsky
Varias marchas recorren París, Londres, Barcelona o Dublín en repulsa por la muerte de los nueve activistas turcos.- Manuel Tapial y Laura Arau encabezan la manifestación en Barcelona
EL PAÍS / AGENCIAS – Barcelona / París – 05/06/2010
Miles de personas se han manifestado este sábado en Barcelona, París, Londres y Dublín para demostrar su solidaridad con los palestinos y denunciar el asalto del Ejército israelí contra la Flotilla de la Libertad, que pretendía trasladar ayuda al territorio palestino y que concluyó con nueve activistas muertos.
Los cooperantes Laura Arau y Manuel Tapial, que iban en uno de los barcos cuando se produjo el asalto, han encabezado la manifestación en Barcelona, que se ha desarrollado pacíficamente durante una hora y media y ha reunido a unas tres mil personas. Se ha iniciado en los jardines de Gràcia y terminado en la plaza Sant Jaume, donde están las sedes de la Generalitat y el Ayuntamiento. Cuando la manifestación ha pasado por delante de la oficina de la Unión Europea en el paseo de Gràcia, algunos manifestantes han lanzado globos con pintura contra fachada del edificio para protestar por la tibieza, a su juicio, de la reacción europea al ataque israelí.
Los activistas españoles han manifestado su intención de llevar Israel ante la Justicia internacional por haber violado la Convención de Ginebra y consideran que el asalto constituyó un acto de piratería que terminó con el asesinato de civiles. Por la mañana, un grupo de diez activistas se ha encadenado ante la delegación del Gobierno español en Cataluña para denunciar la pasividad de este ante las constantes vulneraciones del derecho internacional por parte de Israel.
Los manifestantes de París se han reunido en la plaza de la Bastilla, donde han exhibido banderas palestinas y un cartel donde se leía Unión judía francesa por la paz, con alrededor de cien judíos secundándola. "Creo que el bloqueo a Gaza es contraproducente para Israel", ha agregado uno de los asistentes judíos a la concentración, Michel Bontemps. Asimismo, para unirse a las protestas contra Israel por su actuación contra la flotilla, la cadena de cines francesa Utopia ha anunciado su intención de no proyectar la producción israelí Cinco horas desde París, a pesar de que la película es una historia de amor sin pretensiones políticas aparentes.
"Demostrar solidaridad con los palestinos no significa que seas un terrorista", ha asegurado un manifestante francés, Youssef Ben Derbal, que estaba a bordo del Mavi Marmara cuando fue interceptado por el Ejército israelí el pasado lunes.
Por otro lado, en Londres miles de manifestantes que vestían camisetas con el eslogan Gaza libre, se han concentrado en torno a la residencia oficial del primer ministro británico en Downing Street antes de emprender una marcha hacia la Embajada israelí. Allí pretendían expresar su repulsa por la muerte de los nueve activistas pro palestinos, según informa la agencia de noticias británica PA. Entre los asistentes a esta protesta estaba la activista de la Campaña de Solidaridad con Palestina Sarah Colborne, que también viajaba en el Mavi Marmara.
Las calles del centro de Dublín también han sido recorridas por cientos de manifestantes este sábado en protesta por la captura por parte de Israel del barco irlandés Rachel Corrie, que transportaba a activistas y ayuda humanitaria con destino a Gaza y que ha llegado al puerto israelí de Ashdod tras ser abordado. En este caso, los manifestantes se han dirigido a la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores irlandés, que no se ha pronunciado al respecto del abordaje al Rachel Corrie.
"He venido para expresar mi profundo disgusto por lo que el Gobierno israelí ha hecho, secuestrando a nuestros ciudadanos", ha señalado un profesor universitario que participaba en la marcha. "Los israelíes no tienen derecho a interceptar embarcaciones en medio del mar y no tienen derecho a implementar el bloqueo en el primer lugar, es completamente ilegal", ha agregado.
Valoración de Chomsky del ataque israelí contra la Flotilla de la Libertad
Pura agresión criminal sin ninguna justificación
commonsdreams.org
Traducido para Rebelión por LB
El profesor Noam Chomsky, prestigioso analista de política exterior y autor del best seller Hegemonía o supervivencia y, más recientemente, de Esperanzas y Perspectivas (Haymarket Books), realizó las siguientes declaraciones al diario egipcio Al-Ahram en relación con la justificación dada por Israel a su ataque contra las embarcaciones que transportaban ayuda humanitaria a Gaza y, en un contexto más amplio, sobre el bloqueo económico que los activistas a bordo de la flotilla humanitaria trataban de romper. Chomsky, que es judío, fue detenido recientemente por funcionarios de fronteras israelíes que le prohibieron entrar en Cisjordania para impartir una conferencia programada con antelación, lo que provocó un debate internacional e indignación en Israel en torno a la cuestión de la libertad de expresión.
Secuestrar embarcaciones en aguas internacionales y matar a sus pasajeros es, por descontado, un delito grave. Los editores del diario londinense Guardian están en lo cierto al decir que "Si un grupo armado de piratas somalíes hubiera abordado ayer a seis buques en alta mar, matando al menos a 10 pasajeros e hiriendo a muchos más, una fuerza expedicionaria de la OTAN ya estaría surcando las aguas rumbo a la costa somalí".
Merece la pena recordar que el delito no es nada nuevo.
Durante décadas Israel ha venido secuestrando barcos en aguas internacionales entre Chipre y el Líbano, matando o secuestrando a pasajeros, a veces trasladándolos luego a cárceles israelíes, incluso a prisiones/cámaras de tortura secretas, y manteniéndolos a veces como rehenes durante muchos años.
Israel asume que puede perpetrar esos crímenes con total impunidad porque los EEUU se los tolera y porque Europa respalda normalmente las decisiones de EEUU.
Lo mismo ocurre con respecto al pretexto esgrimido por Israel para justificar su último crimen: que la Flotilla de la Libertad transportaba materiales que podrían utilizarse para fabricar búnkers para cohetes. Dejando de lado lo absurdo del argumento, si Israel estuviera realmente interesado en detener los cohetes de Hamas, sabe exactamente lo que debe hacer: aceptar las ofertas de alto el fuego de Hamas. En junio del 2008 Israel y Hamas llegaron a un acuerdo de alto el fuego. El gobierno israelí reconoce formalmente que hasta que Israel rompió dicho acuerdo el 4 de noviembre invadiendo Gaza y matando a media docena de activistas de Hamas, la organización palestina no disparó ni un solo cohete. [Tras la ruptura,] Hamas ofreció renovar el alto el fuego. El gabinete israelí consideró la oferta y la rechazó, prefiriendo lanzar su asesina y destructiva operación Plomo Fundido el 27 de diciembre. Evidentemente, no hay justificación para el uso de la fuerza "en defensa propia" cuando no se han agotado todos los medios pacíficos. En este caso ni siquiera se intentaron, a pesar de que —o tal vez debido a que— había muchas razones para suponer que tendrían éxito. La operación Plomo Fundido fue, por consiguiente, una pura agresión criminal sin ninguna justificación creíble, y lo mismo puede decirse del empleo de la fuerza realizado por Israel contra la flotilla humanitaria.
El asedio de Gaza en sí mismo no tiene la más mínima justificación creíble. Fue impuesto en enero del 2006 por EEUU e Israel para castigar a los palestinos por haber votado "al candidato equivocado" en unas elecciones libres, y se intensificó gravemente en julio del 2007 cuando Hamas derrotó una intentona patrocinada por Estados Unidos e Israel para derrocar al gobierno elegido mediante una golpe militar destinado a instalar en el poder [en la Franja de Gaza] al hombre fuerte de Fatah, Muhammad Dahlan. El bloqueo es salvaje y cruel, está diseñado para mantener a los animales enjaulados apenas con vida, lo justo para aplacar las protestas internacionales, pero poco más. Es la última fase de los planes israelíes de larga data, respaldados por los EEUU., para separar Gaza de Cisjordania.
Estos son apenas los rasgos generales de unas políticas muy feas de las que también Egipto es cómplice.
¿Hasta cuándo la impunidad de Israel?
Alain Gresh, Le Monde Diplomatique
El asalto realizado por el ejército israelí en la madrugada del 31 de mayo a la flotilla de buques que transportaba ayuda humanitaria a Gaza habría provocado una veintena de muertos. El ataque se produjo en aguas internacionales y ha suscitado numerosas condenas, incluyendo las de los países europeos y las del gobierno francés. Bernard Kouchner ha declarado que "nada puede justificar el uso de semejante violencia, que condenamos". Varios países, entre ellos Suecia, España, Turquía y Francia, han llamado a consultas al embajador israelí. Grecia ha suspendido unas maniobras aéreas que tenía previsto desarrollar con Israel y ha cancelado una visita del jefe de la Fuerza Aérea Israelí.
Por supuesto, estas condenas son bienvenidas. Sin embargo todavía hay algunas personas que se atreven a buscar justificaciones a la acción israelí. Así, el portavoz de la UMP, el inefable Frédéric Lefebvre ha dicho, según AFP, que su partido "lamenta" los muertos, pero ha denunciado las “provocaciones” de “quienes se llaman amigos de los palestinos”.
La víspera del ataque militar, haciendo gala de una clarividencia que forma parte de sus innumerables cualidades, Bernard-Henri Levy dijo en Tel Aviv: "Nunca he visto un ejército tan democrático y que se plantee tantas cuestiones morales”. (Haaretz.com, 31 de mayo). Es cierto que durante la guerra de Gaza nuestro filósofo, encaramado a lomos de un tanque israelí, entró pavoneándose en territorio gazatí. En respuesta al ataque de hoy, Levy lo ha calificado, según refiere AFP, como "estúpido", porque amenaza con empañar la imagen de Israel. Ni una sola palabra de condena, ni una palabra de condolencia por los muertos…
La única pregunta pertinente ahora es qué precio deberá pagar el gobierno israelí por su crimen. Durante años la ONU ha adoptado decenas de resoluciones ("Resoluciones de la ONU que Israel no ha respetado”, Le Monde diplomatique, febrero de 2009), la Unión Europea ha votado infinidad de textos exhortando a Israel a cumplir el derecho internacional, o simplemente la legislación humanitaria, levantando, por ejemplo, el bloqueo de Gaza. Estos textos no tienen nunca ninguna consecuencia práctica. En lugar de ello, la Unión Europea y los Estados Unidos recompensan a Israel.
Esto quedó demostrado la semana pasada con la admisión de Israel en la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), y con la visita a Francia del Primer Ministro israelí Netanyahu para asistir a la entronización de su país. Como señaló un comunicado de la Asociación Solidaridad Franco-Palestina (AFPS) del 30 de abril ("¿Israel en la OCDE? Un duro golpe contra la paz!"), esta adhesión equivale a aceptar la inclusión de Cisjordania y los Altos del Golán en el "perímetro" de Israel. El hecho de que a los pocos días Israel se haya permitido atacar a la Flotilla de la Paz confirma que ese Estado interpreta esos gestos de cortesía como una carta blanca para sus acciones.
Ese fue el caso en diciembre de 2008. Entonces fue la Unión Europea la que decidió "aumentar" las relaciones bilaterales con Israel, otorgando a ese Estado privilegios de los que hasta entonces sólo disfrutaban unas pocas grandes potencias. Pocos días después los tanques israelíes se lanzaron al asalto de Gaza y cometieron con total impunidad "crímenes de guerra" y "crímenes contra la humanidad".
Richard Falk, enviado especial de la ONU para los Territorios Ocupados, escribió en Le Monde Diplomatique (marzo 2009) un texto titulado "Hay que llevar al banquillo a los responsables de la agresión contra Gaza". Unos meses más tarde, la Comisión de la ONU presidida por el juez sudafricano Richard Goldstone entregó sus conclusiones. Resultaron devastadoras para Israel, aunque tampoco eximían a Hamás. El texto del informe Goldstone confirma que fue efectivamente el ejército israelí el que rompió el alto el fuego, y arrojó luz sobre los crímenes cometidos. Este texto confirmó muchos de los informes ya publicados por Amnistía Internacional y Human Rights Watch.
Estos textos no han dado lugar a ninguna sanción contra el Gobierno israelí. Uno de los argumentos esgrimidos para justificar esta inacción es que los hechos denunciados han sido objeto de investigaciones serias por parte de Israel, extremo que desmintió de forma argumentada el abogado Sharon Weill en Le Monde Diplomatique (septiembre 2009, "Desde Gaza a Madrid: el asesinato selectivo de Salah Shehadeh”).
Además se está desarrollando en Israel una ofensiva sin precedentes contra las organizaciones defensoras de los derechos humanos, tanto internacionales como israelíes, consideradas ahora como una amenaza estratégica para el Estado israelí a la que sólo supera en importancia la amenaza de Irán, Hamas e Hizbulá. Una auténtica campaña de deslegitimación de esas organizaciones se está llevando a cabo a través de grupos apoyados por el Gobierno y la extrema derecha israelíes, tales como NGO Monitor (Monitor de ONG). Paralelamente, se está librando una guerra de propaganda para justificar lo injustificable (véase Dominique Vidal, "Cuanto más grande es la mentira…”, Le Monde Diplomatique, febrero de 2009). En semejante contexto apenas sorprende que los soldados israelíes consideren a los militantes que transportan suministros a Gaza como "terroristas" y los traten como a tales.
¿La impunidad continuará, o algunos gobiernos se atreverán a adoptar medidas para sancionar a Israel, para hacer comprender a su Gobierno (y a su gente) que su política tiene un precio, que la represión tiene un precio y que la ocupación tiene un precio?
Dentro de la Unión Europea París podría sugerir a sus socios suspender el Acuerdo de Asociación en virtud del artículo 2, que establece explícitamente que Israel está obligado a garantizar la protección de los derechos humanos (léase Isabelle Avran, "Los retrasos de la UE con respecto a Israel”, La Valija diplomática, 25 de junio de 2009).
Francia podría adoptar tres medidas desde ahora mismo, sin esperar a llegar a un acuerdo con sus socios europeos:
– En primer lugar –y en estricto cumplimiento de la legalidad y de las decisiones de la Unión Europea–, iniciar una campaña para determinar el origen de los productos israelíes exportados a Francia, y prohibir (no sólo gravar) la importación de productos procedentes de los asentamientos;
– En segundo lugar, declarar que la instalación de colonos en los territorios palestinos ocupados es inaceptable y que tales colonos quedarán sujetos a un régimen de visado si desean viajar a Francia, una medida muy fácil de aplicar a partir de las direcciones de las personas que desean visitar nuestro país;
– Por último, decretar que los ciudadanos franceses que hagan su servicio militar en Israel no están autorizados a servir en los territorios ocupados, y que si colaboran con las acciones de un ejército de ocupación pueden sufrir consecuencias penales.
Bernard Kouchner ha anunciado que no hay ningún ciudadano francés entre los muertos de la flotilla humanitaria. Pero ¿sabe acaso si hay ciudadanos franceses entre los responsables de ese crimen?
Traducido para Rebelión por LB
Fuente: http://blog.mondediplo.net/2010-05-31-Israel-l-impunite-jusqu-a-quand